La exsecretaria de Gobernación y hoy flamante presidenta nacional de Morena, Luisa Alcalde, “vino por lana y salió trasquilada” en su intento de regaño a la minada militancia en Jalisco. Alcalde seguro que no esperaba que asistentes al encuentro con su lideresa, le dieran la espalda a la dirigente estatal, Katia Castillo, en muestra de repudio y del fracaso que muchos de los inconformes ven tras los resultados de las elecciones del 02 de junio. Que pena que Luisa Alcalde ni siquiera tenga un diagnóstico objetivo de la tremenda división del partido y de los cacicazgos que se levantan al interior de Morena en Jalisco, encabezados por Carlos Lomelí. ¡Vaya reto que tiene encima Luisa Alcalde!.