Apenas lleva 15 días en el gobierno Pablo Lemus, y ya le ha propinado varios “golpes” políticos a su antecesor Enrique Alfaro. Primero, el anuncio de la verificación vehicular gratuita, luego el operativo por desaparecidos en la Central (problema que no reconoció Alfaro), después la noticia de que los 54 MDP de las “alcancías rateras” (sí, ese dinero que en seis años Alfaro nunca transparentó) se aplicarían para familias de desaparecidos, y ahora el anuncio de que el caso del asesinato del exgobernador Jorge Aristóteles no está cerrado, tal como se empecinó Alfaro en señalar, sólo porque se habían girado órdenes de aprehensión contra los autores materiales. Pareciera que a Lemus le urge deslindarse de la mala imagen que dejó Alfaro.