En la desesperación por el poco tiempo que le resta a los naranjas, antes del 2 de junio, el gobernador Enrique Alfaro Ramírez denuncia posible sabotaje a instalaciones hidráulicas y habla de presuntos criminales con negras intenciones. “No quiero pensar que existen intereses políticos detrás de estos actos”, dice, mientras que desde Casa Jalisco da la instrucción a sus diputados de MC para NO discutir la grave crisis en el suministro de agua en la zona metropolitana de Guadalajara. Los naranjas, con todo y su gobernador, saben que la discusión la tienen en el electorado en las calles y sólo cuentan con unos días para evitar ser derrotados en las urnas.