Desde El Búnker
Alberto Osorio
Martes 19 de noviembre de 2024.- Los jaloneos por los asuntos discordantes entre Alfaro y Lemus se intensifican en lo oscurito y el pleito por el acomodo de plazas y puestos en favor de “Los Pablitos” deja en claro la forma en que se intenta desvanecer el poder y la influencia de Alfaro y la manera en que Pablo Lemus Navarro “puja” para demostrar que tiene toda la capacidad para acomodar a su equipo en todos los lugares que sea necesario.
Pablo rompe acuerdos o negociaciones de Enrique con actores políticos o partidos. El caso más polémico se registró en la integración de las comisiones en el Congreso, con la asignación de puestos en la administración de la LXIV Legislatura, y en un asunto que terminó en un pleito “en lo oscurito”, en donde quedó de manifiesto que MC usó y desechó al PAN, antes de correr a los brazos de Morena.
Son tiempos de fajarse, y aquella imagen de Alfaro y Lemus caminando agarrados de la mano en el “romántico” malecón de Puerto Vallarta parece una escena que caducó muy pronto, pues la transición Alfaro-Lemus es menos tersa de lo que muchos se pudieran imaginar.
Hay signos de un encontronazo Alfaro-Lemus justo 20 días antes de la toma de posesión de Pablo, programada para el 06 de diciembre.
Ante la denuncia de falta de recursos para Jalisco en el paquete del presupuesto 2025, Pablo Lemus Navarro, en su calidad de gobernador electo, acusa demagogia de parte de la administración que encabeza Claudia Sheinbaum, en el trato financiero hacia la entidad.
Lemus Navarro no quiere entender que el principal reclamo debe anotarse contra de los 37 legisladores que representan a Jalisco; entre ellos hay 33 diputados federales y 4 senadores que son parte del Poder Legislativo Federal. Ahí están de Morena, de MC, del PAN, PT y del Partido Verde.
Lo peor de todo esto es que Pablo Lemus se ha comportado de manera desastrosa en el intento de ser visto por la presidenta de México. Queda claro que Claudia Sheinbaum Pardo optó por no recibir a Lemus como gobernador electo y quizás la mandataria tenga otros datos de lo ocurrido en las elecciones del 2 de junio de 2024, tal vez por ello prefiere ver a Lemus desde lejos y esperar a que asuma como gobernador constitucional.
Enrique Alfaro vivió seis años de su gobierno golpeando a la administración de la 4T que encabezaba Andrés Manuel López Obrador, y las consecuencias las vivió Jalisco.
Pablo todavía no inicia su gestión y ya acusa al gobierno de Sheinbaum de “demagogia”. En el fondo, Lemus maneja un lenguaje con marcadas frases dignas de ser analizadas por las y los expertos en temas de igualdad sustantiva o de igualdad de género.
¿Será acaso que a Lemus le traiciona el subconsciente y que su narrativa exhibe elementos de una conducta machista cuando pretender ser visto y escuchado, a como dé lugar, en calidad de patrón en el gobierno, a pesar de que Claudia Sheinbaum no demuestra ninguna prisa para dialogar con él?
¿O será que se trata, quizás, de ocurrencias del exdirigente de Coparmex Jalisco, quien no entiende que tiene que refinar su estilo antes de atreverse a lanzar frases como: “se va a sentir muy a gusto trabajando conmigo”, tal como le gusta fanfarronear?
Hay que recordar que Lemus ya fue acusado, en la pasada campaña política, de violencia de género por parte de la excandidata de Morena, Claudia Delgadillo.